¿Qué son y cómo se generan los pensamientos circulares?
Los pensamientos circulares surgen cuando nuestro cerebro es incapaz de encontrar una solución satisfactoria a un problema que se ha producido.
Son pensamientos recurrentes que a veces se apoderan de nuestro cerebro, nuestras emociones e incluso conductas. Son pensamientos que tienen una cualidad obsesiva y repetitiva que nos secuestra y limita. A este tipo de pensamientos también se les conoce como rumiación
Un ejemplo de este tipo de pensamientos es cuando hemos tenido una discusión con un ser querido y pasamos horas dándole vueltas sin parar a lo que dijimos, a lo que dijo ella, a porque lo dijo...
Y entramos en bucle, sin tomar una decisión y haciéndonos perder tiempo. Al entrar en ese bucle, nos perdemos en nuestros pensamientos y resulta más difícil salir de ese círculo. Ese torbellino se hace cada vez más fuerte y nos arrastra a estados emocionales nocivos, que generan creencias y conductas que pueden sernos dañinas. Estos pensamientos inundan nuestro cerebro y nos abruman, generando frustración
Este tipo de pensamientos surgen cuando existe un conflicto que impide que tomemos una decisión. Un claro ejemplo de esto, ocurre cuando ante dos soluciones opuestas no somos capaces de hacer prevalecer una sobre la otra.
En el ejemplo anterior de la discusión, los valores y creencias en conflicto podrían ser "el amor hacia esa persona" y "la necesidad de justificar nuestra acción" y esa confrontación de valores, genera un conflicto porque no sabemos discernir cuál es más importante para nosotros y eso nos genera incertidumbre.
Esa incertidumbre, genera miedo, porque el cerebro lo identifica como una amenaza y se pone en marcha para buscar una solución y el problema es que no dejamos de pensar, porque nuestra mente esta diseñada para encontrar soluciones y hasta que no la encuentra no ceja en su empeño.
Esta situación nos genera frustración y surge en nosotros un nuevo pensamiento relacionado con esa frustración y el deseo de dejar de pensar.
De nuevo se genera un nuevo conflicto, esta vez entre dos posibles decisiones dejar de pensar y seguir pensando para encontrar una solución. Debajo de esas decisiones están los valores "salud mental= dejar de pensar" y "Autorealización=seguir pensando para encontrar una solución satisfactoria" Y de nuevo empieza el circulo de pensamientos, y así hasta el infinito si no somos capaces de cortarlo
En el siguiente gráfico podemos ver como se produce la secuencia que nos mantiene en el bucle:
¿Cómo romper el bucle de pensamientos?
Los pensamientos circulares, por tanto, nos atascan y se convierten en un obstáculo para la solución que buscamos generándonos malestar. Es por ello necesario antes de que se apoderen de nosotros, hacer frente a estas cavilaciones.
A continuación te dejo algunas opciones que pueden ayudarte a salir del bucle.
Lo primero de todo es darte cuenta que efectivamente te has enfrascado o te vas a enfrascar en un pensamiento circular. Reconoce el inicio de los pensamientos nocivos y prepárate a ponerles fin.
Cuando nos preguntamos por qué una persona hace una cosa, estamos en primer lugar suponiendo muchas cosas que desconocemos, no estamos en su piel y no sabemos cuales son el propósito real de sus acciones.
Pero además esa pregunta nos conduce al pasado, a justificar la situación realizada en el pasado y eso no nos ayuda a encontrar una solución. Sin embargo si transformamos los "por qué" en "Para qué", la respuesta a esa pregunta nos conduce al futuro y por tanto a una posible solución.
Sabes que la diosa Isis era una diosa egipcia maga poderosa, esposa de Osiris, el dios de los muertos, y madre de Horus.
Vale, pues no me refiero a eso, me refiero a los pensamientos que empiezan con la condicional "Y si..." que nos lleva a buscar posibilidades de que un hecho ocurra, que nos genera a su vez pensamientos que buscan eludir una posible amenaza que directamente es una suposición.
Es decir, pensamos que una posibilidad de que ocurra algo puede convertirse en una realidad y entonces buscamos como solucionarlo, independientemente que la probabilidad de que ocurra sea ínfima.
Por tanto, estamos gastando recursos, tiempo y pensamientos buscando soluciones a hechos con posibilidades muy escasas de que ocurran. Deja de pensar en cosas que no van a pasar
Cuando se producen estos bucles interminables, nos sentimos paralizados por el miedo de que nuestros mayores temores se hagan realidad.
En ocasiones tenemos tanto miedo de que eso ocurra que no nos permitimos pensar cuales serían las consecuencias posteriores cuando conocerlas podría liberarnos y ayudarnos a romper precisamente ese bucle de pensamiento.
Así que la cuestión es preguntarse: ¿Qué es lo peor que podría ocurrirme?
Una vez explorada esa alternativa es hora de preguntarnos también: ¿Qué es lo mejor que podría ocurrirme?
Y de repente es miedo desaparece, porque asumimos la decisión
Relájate poniendo el foco en la respiración. Respira profundamente, fijándote en como pasa por cada lugar de tu cuerpo el aire al inhalar y al exhalar.
La idea es reducir la presión que genera el pensamiento circular dejando la mente en blanco, cortando el proceso de pensamiento al centrarse en las sensaciones corporales y emociones
Cualquier pensamiento negativo tiene uno positivo de igual fuerza que puede contrarrestarlo. La idea es buscar pensamientos, imágenes y sonidos que puedan ayudarnos a combatir esos pensamientos negativos que surgen por la frustración
Un estimulo que nos permiten romper el proceso de pensamiento. Es un mecanismo de reseteo.
El estimulo de corte debe ser breve, de intensidad y voluntario. La idea es conjugar una imagen, un sonido y una sensación corporal por que eso hará que sea mucho más efectivo.
La imagen debe ser algo que para ti sea evocador, que te recuerde a un corte, por ejemplo una señal de stop, o unas tijeras cortando una cinta, o cuchillo cortando una cuerda.... cuanto más rico en detalles mucho mejor será el efecto.
El sonido puede ser una palabra corta que te digas como por ejemplo: "BASTA" o "STOP" o "suficiente" y además puedes añadirle tu nombre delante como por ejemplo: "DAVID BASTA"
La sensación corporal puede ser un pellizco, una palmada, apretar un dedo con la otra mano, morderte el labio... debe ser algo mínimo, que no genere dolor pero si incomodidad
El estímulo de corte requiere automatización para ser eficaz, por eso es necesario que la practiques para poder utilizarla cuando la necesites. Cuanto más lo entrenes y lo uses más eficaz y automática se volverá
Una vez que has utilizado el estimulo de corte y por tanto tu cerebro está en "stand-by" es necesario darle otra ruta de pensamiento, es cuando entra en juego los pensamientos positivos que antes has creado. Se trata de darle alimento al cerebro, pero que además nos ayude a nosotros.
Cambiar el foco también puede ser realizar acciones que distraigan a la mente de su "run run" como por ejemplo hacer deporte o realizar acciones manuales que requieran mayor concentración, como pintar, o hacer manualidades, o esculturas...
Centrémonos en lo que podemos hacer ahora, en este momento, no en el futuro y por supuesto no en el pasado.
En definitiva, se trata de ser consciente y también responsable del momento actual, de lo que sientes a través de todos tus sentidos. Vivir en el presente significa eliminar las distracciones y focalizarse en el aquí y ahora.
Una de las formas con las que mejor se conecta con el presente es con la meditación y más concretamente con el mindfulness.
¿Qué te falta entonces para salir del círculo?
Ponte ahora mismo a practicar estas recomendaciones y escríbeme en los comentarios como te ha ido y además si tu utilizas alguna otra forma de salir de ese tipo de pensamientos recurrentes.